¡Prepáralas tú misma!
Si bien no se sabe con exactitud cuándo se originaron las mascarillas, es un hecho que las mujeres han sido las pioneras en mezclar ingredientes naturales y untarlos en la cara o el cuerpo, con el objetivo de sanar. Al untar lodo o arcilla se dieron cuenta que su piel lucia más bonita después de aplicarla.
Se percataron también que algunos ingredientes caseros podían servir para cuidar el cutis y sentirlo como nuevo. Las grandes marcas los envasaron y ahora los usan como parte importante en sus fórmulas.
Algo más que sólo untar
Los beneficios de las mascarillas son muchos siempre y cuando utilices las más adecuadas para ti. El secreto está en la elección de los ingredientes, en cómo te las apliques, el tiempo que te las dejes y, sobre todo, que te hagan sentir bien.
Cómo usarlas
Una vez que tengas tu mascarilla lista sigue estos sencillos tip´s
Es importante que tu cara esté completamente limpia incluso, si es posible exfoliada.
Antes de la aplicación puedes hacer vaporizaciones con té de manzanilla para que tus poros se abran y penetre mejor.
Puedes untarla con un “abatelenguas”, pincel o brocha gruesa. Empieza de adentro hacia fuera de tu cara. Indispensable higiene.
Retírala antes de 30 minutos. Si sientes que te arde la cara, quítala de inmediato.
Úsalas una vez por semana.
Tour de bienestar
1 Prepara todo antes de empezar a aplicarla.
2 Pon uno de tus discos favoritos, de preferencia que te relaje y te haga sentir tranquila. También puedes prender alguna vela aromática o una varita de incienso.
3 Cuando tengas puesta la mascarilla recuéstate en una posición cómoda, con tus pies recargados hacia arriba, de esta forma la sangre de tus piernas circulará mejor.
4 Cuida no pasar del contorno de los ojos y la boca, son áreas muy delicadas.
5 Puedes colocar rodajas de pepinos o de papa fría en tus ojos para que descongestionen y, de pasó, eliminen las “bolsas” causadas por el cansancio.
6 Ten a la mano un reloj para que no te pases del tiempo recomendado.
7 Piensa en lo rico que es consentirte y siente como los ingredientes penetran en tu piel.
8 Retira la mascarilla con agua tibia. No talles tu cutis al secarte.
Tips para que realices tus mascarillas de manera natural
¡Prepáralas tú misma!
Mascarillas caseras
Para preparar tu propia mascarilla, sólo necesitas algunos ingredientes para que quede perfecta. Aquí te damos algunas sugerencias para “apapachar” a tu piel en todo momento.
Para un día pesado
Mezcla unas cucharadas de miel de abeja con fresa, plátano, gotitas de aceite de oliva y una cucharada de avena. Los ingredientes relajarán tu piel del estrés.
¿Quieres refrescarte?
Mezcla una cucharada de hierbabuena machacada con 2 cucharadas de yogur natural y una de agua. Cuando la retires te sentirás como nueva.
Remedio anti-edad
Mezcla una clara de huevo con dos cucharadas de miel para que tu piel se estire y se difuminen las arrugas.
Piel grasa
Muy sencillo, mezcla una taza de harina de avena con media taza de leche. La avena es ideal para eliminar la sensación de grasa en tu piel.
Revitalizante
Pon al fuego 3 cucharadas de miel de abeja y cuando esté caliente, ponle unas gotas de limón o de naranja y mezcla bien la miel. Aplica cuando la miel no esté tan caliente.
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