Por Luisa Maya Funes *
Cuando se habla de la lactancia, se hace referencia generalmente a la cantidad y calidad de la leche y a los beneficios para la salud del bebé. Se ignora la importancia que esto tiene para la salud materna.
En este artículo pretendemos hablar de ti, de tu salud, de tu alimentación y de tu autocuidado durante el proceso de la lactancia.Se han descubierto todas las ventajas y cualidades de la lactancia, lo importante es llevarla a cabo con las técnicas correctas para garantizar no sólo la buena alimentación de tu bebé sino también tu salud y bienestar.
Beneficios de la lactancia
Es importante saber que el amamantamiento en el postparto ayuda a la involución del útero;
–previne el riesgo de sangrados;
–regula los niveles hormonales previniendo un nuevo embarazo gracias a la elevada producción de la hormona prolactina;
–promueve el descenso de peso tras el parto;
–reduce el riesgo de cáncer mamario;
-contribuye a establecer un vínculo entre la madre y su bebé y,
-es un método económico y muy nutritivo para alimentar al recién nacido.
Cabe señalar que las glándulas mamarias, a diferencia de otros órganos, continúan su proceso de desarrollo a lo largo de la adolescencia, la vida adulta y hasta el final del embarazo que es cuando los conductos alcanzan su mayor nivel de ramificación y crecimiento, y las células productoras de leche logran un mayor nivel de funcionalidad, por lo que la mayoría de las mujeres tienen la posibilidad de lograr una lactancia exitosa, sin importar el tamaño o composición de sus pechos; sin embargo, cada pecho tiene una capacidad de producción o de almacenamiento diferente, por lo que es importante mantener un horario flexible y alimentar al bebé a libre demanda.
La producción de leche
Sabemos que durante los primeros días del postparto se produce calostro y, en la medida que evoluciona el proceso de amamantamiento y el recién nacido estimula succionando la glándula mamaria, se manifiesta un incremento paulatino del volumen y composición de leche materna. Hay factores que pueden retrasar este proceso como sucede con las que son madres primerizas, las que presentan un parto difícil, quienes dan a luz por cesárea o quienes presentan algún descontrol metabólico, pero si se evoluciona adecuadamente con la lactancia, esto generalmente logra regularse. Aquí lo importante es que no se desmotiven y continúen lactando al bebé.
Los primeros 6 meses
Es importante señalar que la alimentación al seno materno se recomienda como único alimento durante los primeros 6 meses de vida del bebé, luego puede iniciarse el proceso de ablactación o introducción de nuevos alimentos de manera paulatina, bajo la recomendación del pediatra. Para que la madre pueda alimentar adecuadamente al bebé, ella debe estar bien alimentada; esto implica, el consumir alrededor de 500 calorías adicionales durante los primeros 6 meses y ya iniciada la ablactación 400 para tener una adecuada producción de leche.
Evita sustancias dañinas
Se debe consumir suficiente agua y evitar el consumo de sustancias que pueden ser transmitidas al bebé a través de la leche como medicamentos, drogas, tabaco, cafeína o alcohol, por lo que no se recomienda consumir café, té negro y menos aún cerveza. Además, deben evitarse los alimentos irritantes como el chile o el curry y los alimentos alergénicos en mujeres con antecedentes de alergias alimentarias, para evitar transmitirlas al bebé.
Aprende la técnica para amamantar
La mejor preparación para la lactancia es la información desde el embarazo para saber llevar una práctica y una técnica correctas para producir la suficiente cantidad de leche. Esto no implica ir preparando los pezones como se usaba antaño, lo cual sólo lastima la piel, sino conocer la técnica adecuada para amamantar introduciendo en la boca del bebé el pezón y parte del tejido del pecho por debajo de la areola para que el recién nacido pueda succionar eficientemente la leche evitando así que se lastime la piel por el roce de su boca. También es importante que si la mujer presenta pezones planos o invertidos aprenda técnicas correctas para el uso de la ‘bomba tira leche’ cuando su pecho se encuentre congestionado, o cuando ella no pueda estar presente para amamantarlo.
Lo importante: que estés relajada
Otra recomendación es que la madre necesita una posición relajada y cómoda para alimentar a su bebé por lo que puede ensayar distintas técnicas y posiciones, permitiendo que el bebé succione hasta que se desprenda, luego puede ofrecerle el otro pecho o dejarlo hasta la siguiente tetada, permitiendo su libre demanda.
Lactancia:
La alimentación al seno materno se ha llevado a cabo desde tiempos ancestrales, en la actualidad, gracias a los avances científicos se han redescubierto todas sus ventajas y cualidades, lo importante es llevarla a cabo con las técnicas correctas para garantizar no sólo la buena alimentación de tu bebé sino también tu salud y bienestar.
*Nutrióloga – Psicoterapéuta