Lidiar con el ataque de diarrea o estreñimiento nunca es divertido, pero el momento más inoportuno para experimentar problemas digestivos, es mientras viajas.
«La diarrea del viajero es el ejemplo obvio», dice el Dr. Eamonn Quigley, gastroenterólogo del Hospital Houston Methodist. «Generalmente se piensa que los problemas estomacales se limitan a viajar en ciertas áreas del mundo donde el riesgo de gastroenteritis es alto, pero no siempre es así».
Ciertamente es algo que debes conocer y tomar medidas para prevenirlo, el Dr. Quigley señala que la diarrea durante el viaje puede ocurrir en cualquier lugar y no está relacionada con una infección necesariamente.
«La mayoría de la gente no se da cuenta de que el estreñimiento es en realidad el fenómeno gastrointestinal más común que surge durante un viaje», dice el Dr. Quigley. «La razón número uno para el estreñimiento ocasional es viajar».
Estos no son los únicos dos problemas gastrointestinales que parecen surgir. Es posible que descubras que es más probable presentar acidez estomacal mientras estás fuera de casa. Volar puede hacer que te sientas hinchado y con gases. Y es probable que todos estemos familiarizados con las náuseas que también a veces pueden acompañar un viaje en automóvil, barco o montaña rusa.
10 causas de problemas estomacales mientras viajas
«Hay varias cosas que pueden conducir a problemas digestivos mientras vuelas, específicamente», dice el Dr. Quigley. «Las personas propensas al estreñimiento, la diarrea y otros problemas gastrointestinales podrían desencadenarse más fácilmente por estos factores».
Una nota importante es que estos factores también pueden sumarse, lo que significa que pueden combinarse uno encima del otro y hacer que los problemas se recrudezcan.
Las razones para experimentar problemas estomacales mientras viajas incluyen:
1- Cambios en la dieta
Nuestra dieta y hábitos alimenticios a menudo se tornan diferentes de lo habitual mientras viajamos. Fuera de casa, tenemos menos control de lo que comemos y de los horarios para comer. Podríamos darnos el gusto de comer bocadillos y postres con más frecuencia al estar de vacaciones.
«Tal vez estamos comiendo menos verduras y, por lo tanto, obteniendo menos fibra, lo que puede provocar estreñimiento», dice el Dr. Quigley. «O a veces estamos probando cocinas completamente nuevas e inadvertidamente comemos algo a lo que somos intolerantes y se produce diarrea o indigestión».
Evitar comer en exceso y mantener una dieta equilibrada tanto como sea posible puede contribuir en gran medida a evitar estos destinos.
Pero esto no siempre es totalmente realista durante un viaje, especialmente cuando estás tratando de disfrutar de tus vacaciones. Aquí es donde el Dr. Quigley recomienda saber qué medicamento de venta libre podemos tomar si experimentamos un problema digestivo.
- Los medicamentos antidiarreicos (loperamida, subsalicilato de bismuto) pueden ayudar a reducir la frecuencia de las heces acuosas y blandas
- Los laxantes orales y los ablandadores de heces (polietilenglicol, docusato de sodio) pueden ayudar a aliviar el estreñimiento
- Las píldoras antiácidas pueden ayudar con la acidez estomacal, la indigestión y el malestar estomacal
Asegúrate de tomar estos medicamentos de acuerdo con las instrucciones del paquete.
2- Estrés
«El estrés influye en la función intestinal, que puede ir en cualquier dirección: estreñimiento o diarrea», dice el Dr. Quigley. «Todo lo que tienes que hacer es pensar en ese importante examen que tuviste en la universidad para recordar cómo el estrés puede hacer que los movimientos intestinales sean más frecuentes o sueltos. Pero el estrés también puede conducir a movimientos intestinales incompletos en otros escenarios».
Volviendo a ese baño estrecho y compartido en un avión: el estrés resultante puede evitar que una persona tenga una evacuación intestinal completa, lo que puede contribuir al estreñimiento. Además, cuando están estreñidas, las personas tienden a fijarse mucho en esta situación, señala el Dr. Quigley, lo que aumenta el estrés y empeora el estreñimiento.
Una vez más, no siempre hay mucho que puedas hacer: viajar es estresante a veces. Pero se aplica el mismo consejo anterior: si experimentas diarrea o estreñimiento mientras viajas, los remedios de venta libre adecuados pueden ayudarte a aliviarlo.
3- Deshidratación
Los descansos para ir al baño pueden llevar mucho tiempo en un largo viaje por carretera o ser difíciles de acomodar en ciertos lugares, lo que conlleva a beber menos agua a propósito. Además, un suministro de agua no siempre está disponible mientras se viaja, o bien, la fuente del agua podría no ser segura.
El Dr. Quigley enfatiza la importancia de tener un plan de hidratación mientras viajas, ya sea trayendo una botella de agua que puedes rellenar tú mismo o saber dónde comprar agua sellada que sea segura.
4- Consumo de alcohol
«Debemos hidratarnos con agua, no con alcohol», agrega el Dr. Quigley. «Ya sea una bebida antes de un vuelo o en el almuerzo entre visitas turísticas, debes saber que el alcohol no es hidratante».
De hecho, el alcohol es deshidratante, y recuerda, la deshidratación es un factor de riesgo para el estreñimiento.
5- Cambios de presión barométrica
«Los aviones tienen cabinas presurizadas, pero no están completamente presurizadas», advierte el especialista del Hospital Metodista de Houston. «Cuanto mayor sea la diferencia entre la presión de la atmósfera y la de tu cuerpo, más se expandirá el aire en el estómago, y es por eso que comenzarás a sentirte hinchado mientras vuelas».
«Cuanto más largo sea el vuelo, más notable puede ser el problema», afirma el Dr. Quigley. «Los estudios muestran que las tripulaciones de cabina de larga distancia experimentan más interrupciones intestinales que las tripulaciones de corta distancia».
Ahora es un buen momento para señalar como los factores se suman entre sí, especialmente con ciertos tipos de viajes. Por ejemplo, volar es a menudo un triple golpe: el estrés, la deshidratación y los cambios de presión que son una receta para experimentar estreñimiento mientras viajas si no se tiene cuidado, especialmente si eres una persona propensa.
«Agrega a esto la soda de dieta carbonatada que tomas antes o durante el vuelo, lo que solo empeora la hinchazón», explica el Dr. Quigley.
6- Lo que comes y bebes antes de un vuelo
Cuanto más gaseosas sean tus comidas y bebidas antes de un vuelo, más probabilidades tendrás de hincharte y estreñirte.
«Evita comer alimentos que tienen más probabilidades de causar gases, como cebollas y ajo, durante aproximadamente 24 a 48 horas antes de volar, ya que tu cuerpo tarda bastante tiempo en digerirlos por completo», recomienda el Dr. Quigley.
Los refrescos carbonatados y las aguas con gas son otra causa de hinchazón. En algunas personas, también pueden desencadenar indigestión mientras vuelan. Pero dado que los líquidos pasan a través del cuerpo rápidamente, generalmente solo son un problema cuando se consumen poco antes de abordar un vuelo.
7- Diarrea del viajero
La diarrea del viajero, es un tipo de infección gastrointestinal que ocurre cuando una persona se enferma por consumir alimentos o agua contaminados con un virus, bacteria o parásito. El síntoma principal se indica por su nombre, pero la diarrea del viajero también puede causar calambres abdominales, vómitos e incluso fiebre, cuando la infección es lo suficientemente grave.
«Esto es más común cuando se viaja a ciertas áreas del mundo donde el riesgo de gastroenteritis es alto», dice el Dr. Quigley. «Y es algo que debes investigar antes de tu viaje».
Los consejos para prevenir la diarrea del viajero si viajas a un área de riesgo incluyen:
- Solo come alimentos que hayan sido bien cocinados y a la temperatura adecuada
- Evita comer alimentos crudos, especialmente ensaladas
- Solo bebe agua filtrada de un recipiente sellado
- Evita agregar hielo en tus bebidas
- Viaje con ciprofloxacina en caso de padecer alguna afección gastrointestinal que lo hace propenso a la diarrea (para tomarlo solo si experimentas una infección)
8- Interrupción de su reloj biológico
Cuando el viaje te lleva a través de zonas horarias, puede afectar el ritmo circadiano, así como la forma en la que el cuerpo configura y cronometra su reloj interno.
«Hay variación diurna en muchos de los procesos fisiológicos del cuerpo, incluida la motilidad del colon», explica el Dr. Quigley. «Por la noche, nuestro colon se va a dormir con nosotros. Por la mañana, nuestro colon se despierta y vemos un gran aumento en la actividad».
Pero cuando son las 10 p.m. para su reloj interno y en realidad son las 8 a.m. en su nueva ubicación, se produce confusión. Esto puede contribuir a los problemas gastrointestinales.
«Cambiar su reloj interno por unas pocas horas no es un gran problema, pero 10-15 horas, sí es un cambio significativo que realmente puede interrumpir el ritmo de tu cuerpo», informa el Dr. Quigley. «Esto puede conducir a una motilidad irregular del colon y contribuir al estreñimiento».
9- Olvidarse de traer tus medicamentos si tienes un problema gastrointestinal conocido
Puede parecer obvio, pero el Dr. Quigley señala que olvidarse de empacar los medicamentos que tomas para un problema existente, es una forma muy común de terminar con problemas digestivos en un viaje.
«Ya sea un bloqueador de ácido de venta libre para el reflujo, un laxante oral diario para tratar el estreñimiento o un medicamento recetado para la colitis; una vez que te das cuenta de que has olvidado tu medicamento, encontrar un reemplazo no siempre es sencillo» afirma el Dr. Quigley.
Si viaja a otro país, los nombres comerciales de los productos pueden diferir, y surtir recetas ciertamente no siempre es posible.
El Dr. Quigley también señala que las personas propensas al estreñimiento, en particular, no deben tener miedo de aumentar la dosis de sus medicamentos.
«Especialmente si la persona tiene antecedentes de estreñimiento que empeora con los viajes, a menudo recomendamos que se preparen tomando una dosis adicional de laxante», dice el Dr. Quigley. «Las personas a menudo tienen miedo de aumentar su dosis de laxantes por temor a volverse dependientes, pero no necesitan ser reacios a hacerlo».
10- No estar preparado para el mareo por movimiento
El mareo por movimiento, también llamado a veces mareo de viaje, puede no ser algo en lo que pienses con frecuencia, pero podría ser importante considerarlo al hacer tus planes de viaje, especialmente si no sabes cómo reaccionarás a un tipo de viaje específico que ocasione mareos frecuentes, como los cruceros.
La hinchazón es molesta por sí sola, pero si persiste, también puede contribuir al estreñimiento.
«Esto no es realmente un problema digestivo, pero los síntomas pueden estar relacionados con el sistema digestivo, es decir náuseas y vómitos. Los remedios de venta libre pueden ayudar a aliviar el mareo por movimiento, pero también hay estrategias para prevenirlo si eres propenso, como mantener la vista en el horizonte lejano cuando estás en un barco” finaliza el gastroenterólogo del Hospital Houston Methodist.