Colombia, Chile y Perú han emitido leyes en ese sentido, buscando impulsar sanos hábitos alimenticios. En México, es necesario impulsar la obligación de la industria restaurantera de sumarse a este esfuerzo de informar valor nutrimental y ofrecer opción saludable en menús infantiles, explicó la diputada Ariadna Montiel Reyes.
La diputada Ariadna Montiel Reyes planteó reformar el artículo 115 de la Ley General de Salud, para que establecimientos mercantiles que expenden alimentos informen su valor nutrimental y ofrezcan una opción saludable dentro de los menús infantiles que brindan.En la actualidad, los menús de los restaurantes no informan los gramos de las porciones de cada alimento ni de su calidad, no se contempla el aporte energético de las bebidas con las que se acompañará, ni el postre y, en muchos casos, ninguno de estos es apto para los niños no solo por la alta cantidad de calorías, sino porque no se incluyen frutas y verduras.
Según un estudio de la Universidad Autónoma de Nuevo León, el desayuno debe aportar 25% de las calorías totales, esto es, una ingesta de 450 calorías, pero al analizar los menús se pueden aportar desde un 117.4%o y hasta un 162.6% en exceso, mientras que menús de comidas rápidas pueden aportar de un 140.5% hasta un 224%.
Montiel Reyes, integrante de la Comisión de Derechos de la Niñez, precisó que esa situación se ve reflejada en que México ocupa el primer lugar mundial en obesidad infantil. Datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición indican que 1 de cada 3 adolescentes entre 12 y 19 años presenta sobrepeso u obesidad.
Para los escolares, la prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad ascendió en promedio 26% para ambos sexos, lo cual representa más de 4.1 millones de escolares conviviendo con este problema.
“Esta realidad podría colapsar al sistema nacional de salud, pues este grupo de niñas y niños podrían presentar enfermedades crónicas y degenerativas como diabetes, hipertensión, enfermedades cardiacas y diversos padecimientos, afectando su calidad y expectativa de vida”, añadió.
Ante ello, subrayó Montiel Reyes, los esfuerzos están en crear leyes que protejan el derecho de las y los niños de recibir opciones nutritivas y saludables en los menús infantiles de los restaurantes. “La alimentación de esta población cobra especial importancia en décadas recientes, debido a la industrialización y cambios en las dinámicas familiares y sociales”.
Entre los múltiples factores que inciden en una mala alimentación y repercuten negativamente en la salud infantil se encuentra la ausencia de opciones alimenticias saludables y nutritivas que no excedan las kilocalorías recomendadas y constituyan un menú apropiado para niñas y niños en todos los sentidos, contemplando todos los grupos alimenticios, así como porciones adecuadas.
La industria restaurantera, así como la del procesamiento y venta de alimentos, debe adecuarse a los nuevos esquemas de alimentación de los menores, “puesto que se observa que no en todos los establecimientos se contempla un rigor nutrimental y de calidad, sino que exceden los valores, contribuyendo a una deficiente educación alimenticia”.
Se trata de alertar sobre platillos, comidas o bocadillos de alta densidad energética, altos en grasas saturadas y trans, azúcar y sal, cuyo consumo habitual se ha asociado a la obesidad y a otras enfermedades crónicas.