La piel seca o xerosis es una condición común durante el invierno que afecta en principalmente a las personas mayores, ya que alrededor del 75% de la población mayor de 65 años la padece.
Y es que es bueno recordar que la piel es el órgano más grande del cuerpo; entre sus principales funciones está la de protección de factores externos (ambientales, biológicos, etc.), ayuda a regular la temperatura corporal y a mantener la hidratación.
Pero las bajas temperaturas y el bajo nivel de humedad en temporada invernal reducen el flujo de sangre en el cuerpo y disminuyen los niveles de oxígeno y nutrientes que llegan a la piel.
Es por esta razón que la piel sufre en invierno ya que este órgano requiere entre 15 y 20% de agua para mantener su función normalmente. Las zonas más sensibles son las más expuestas al medio ambiente como las manos, pies, mejillas, labios y cuello.
En caso de no ser atendida de manera oportuna, esta condición puede desencadenar dermatitis xerótica o reaccional, que provoca además enrojecimiento, picazón e hinchazón.
Por ello, el Dr. Daniel Hinostroza, dermatólogo y vocero de AXA Keralty comparte algunas recomendaciones para mantener tu piel sana durante la época invernal y evitar la resequedad:
- Humecta e hidrata constantemente tu piel. Utiliza crema diariamente (varía según la necesidad de cada persona), para que actúen como una barrera protectora y eviten que la humedad se vaya de la piel. Además, es importante beber al menos entre 1.5 y 2 litros de agua al día.
- Utiliza jabones amigables. Úsalos de preferencia con pH ácido o para piel seca o sensible, ya que son apropiados para evitar sequedad e irritación
- Evita lavar excesivamente las manos. El constante contacto con jabones elimina toda la grasa de la piel, lo que ocasiona que sea más fácil tener resequedad.
- Toma duchas con agua templada y de corta duración. Es importante evitar, en la medida de lo posible, la evaporación del agua que tiene tu piel; por lo que lo más saludable es evitar baños con agua muy caliente.
- Utiliza protección solar. Todos los días estamos expuestos a los rayos ultravioletas, sin importar la temporada del año. La recomendación es utilizar un bloqueador con factor de protección solar (FPS) mayor a 30.
- Aumenta el consumo de vitamina C y antioxidantes. Esto ayudará a la producción de colágeno y evita el envejecimiento prematuro, además de darle luminosidad a tu piel.
Acude a un dermatólogo para que te asesore de manera personalizada, ya que cada persona tiene particularidades en su piel que requieren cuidados específicos [.]