Una bebida saludable es aquella que hidrata o aporta nutrimentos al cuerpo sin proporcionar calorías extra a la alimentación cotidiana.
La Secretaría de Salud federal recomienda beber diariamente dos litros de agua para lograr que las personas empiecen a adquirir hábitos saludables de hidratación y complementar con alimentos, como frutas y verduras, que también aportan agua, toda vez que el consumo de vital líquido puede ayudar a reducir calorías, y recomendó intercambiar las bebidas azucaradas por el agua natural.
Mencionó que en la actualidad, en promedio, cada mexicano consume 160 litros de refresco al año, mientras que el promedio mundial es de 7 litros al año por habitante, lo que hace que el país sea el mayor consumidor de bebidas azucaradas en el mundo.
Explicó que el consumo de agua simple es muy deficiente en México, debido a que ha sido sustituida por otro tipo de bebidas generalmente azucaradas. El consumo frecuente de estas bebidas puede causar entre otras cosas sobrepeso y obesidad, síndrome metabólico (presión y colesterol alto) diabetes tipo 2 y enfermedades del corazón.
Ello debido a que el contenido de los azúcares en las bebidas se metaboliza en el hígado y se convierte en grasa, lo que hace que se incrementen los lípidos en la sangre, generado resistencia a la insulina y como consecuencia de esto la diabetes.
Una bebida saludable es aquella que hidrata o aporta nutrimentos al cuerpo sin proporcionar calorías extra a la alimentación cotidiana, por ejemplo, el agua, café, té, infusiones y, en algunos casos, leche descremada y semidescremada.
Los beneficios de consumir agua simple son:
- Principalmente, el de hidratar a nuestro organismo
- Regular la temperatura corporal
- Ayudar a la digestión de los alimentos
- Favorecer la excreción de sustancias toxicas del cuerpo
- Favorecer el transporte de nutrimientos
- Contribuir a eliminar a través de la orina y heces los desechos que el cuerpo no necesita, entre otros.
Finalmente aseguró que es importante la hidratación, para niños, adultos, pacientes geriátricos y deportistas, ya que deben poner especial atención en la correcta ingesta de agua de acuerdo al peso y talla de cada persona, la dieta y la temporada del año, mientras que las mujeres embarazadas deben ingerir una adecuada cantidad de líquido, ya que beneficia en el buen desarrollo del bebé, por lo tanto brinda una correcta hidratación y aumenta la lactancia.