Por Marien Garza, Miembro del Consejo Consultor de Nutriólogos de Herbalife Nutrition. Una de las metas a largo plazo que considero esencial para mantenerse activo y cuidar la salud hoy y siempre es el envejecimiento saludable.
Es una meta que puede empezar a construirse incluso desde la infancia y fortalecerse conforme pasan los años de vida. Implica ser independiente física, mental, económica, social y espiritualmente, en todas nuestras actividades, cuando llegamos a ser adultos mayores. Es tener salud, bienestar y calidad de vida.
Cuando nos enfrentamos a momentos en donde, por circunstancias ajenas a nosotros hay tensión, crisis, estrés o enfermedad a nuestro alrededor, depende de cada uno tomar la decisión de cómo enfrentar estas adversidades.
Para que nuestro camino hacia el Envejecimiento Saludable no se empañe, deseo compartir contigo algunos consejos que pueden transformarse en oportunidades de cambio positivas en la vida:
- Planificar la rutina diaria. La frase “cómo pasamos nuestro día, es esencialmente cómo pasamos nuestra vida” tiene mucha verdad. Debemos contemplar que, para alcanzar nuestros objetivos de salud y bienestar, hay que organizarnos para poder mantener nuestros objetivos.
Tu día a día, puedes agendarlo el día anterior, utilizar un calendario semanal o incluso establecer un programa quincenal. Incluye horarios establecidos que te permitan visualizar ocupaciones personales y profesionales bien separadas y definidas.
Para esta planificación, puedes utilizar una agenda impresa o alguna aplicación tecnológica en tu computadora o celular, que incluso, marque recordatorios para tus actividades.
En el terreno de la psicología organizacional, planificar nuestro día previo al mismo, es una pieza clave en el camino para poder mejorar nuestra productividad personal y poder visualizar de forma más clara nuestras actividades y aspiraciones.
- Mejora tus hábitos. Cada hábito saludable que empieces a trabajar puede ser como “un boleto comprado” que adquieras para completar tu propia “Lotería de la Salud en busca del envejecimiento saludable”.
Puedes dividir tus boletos en:
- mejorar tu alimentación diaria,
- tomar más agua natural y mantener la hidratación con bebidas saludables,
- hacer ejercicio y estar físicamente activo,
- tener una suplementación personalizad y
- buscar descanso efectivo.
Cada uno de “los boletos” puede llevarte diferente tiempo para lograr alcanzarlos, así que nunca debes de darte por vencido, cualquier reto, lo debes de ver como una magnífica oportunidad para mejorar.
- Ocuparse en vez de preocuparse. Si hablamos de la preocupación, la palabra estrés sobresale inmediatamente. Se sabe que muy pocas enfermedades son ocasionadas por una causa única y que el estrés, suele agudizar y acelerar reacciones negativas.
Es por lo que en este punto, si podemos resolver la situación, hay que ponernos en actividad, pero cuando no está en nuestras manos resolver el problema, no debemos de preocuparnos.
Las técnicas de relajación, meditación, ocio y juego son lo que se recomienda a nivel psicológico para ayudar a reducir el estrés.
- Mantén presencia con tus personas cercanas. El Harvard Study of Adult Development, ha encontrado una fuerte asociación entre la felicidad y las relaciones cercanas entre cónyuges, familiares, amigos y círculos sociales.
«La conexión personal crea estimulación mental y emocional, que son estimuladores automáticos del estado de ánimo, mientras que el aislamiento destruye el estado de ánimo”.
- Hacer voluntariado. El voluntariado significa cualquier actividad, en la cual brindas tu tiempo de manera libre sin buscar retribuciones para beneficiar a otras personas, grupos u organizaciones. En México y a nivel mundial, existen muchas causas a las que nos podemos sumar para hacer de nuestro entorno y del mundo un lugar mejor.
Hay proyectos relacionados con derechos humanos, promoción del arte, derechos de los animales, educación, nutrición infantil, apoyo al adulto mayor, entre muchos otros, que pueden empoderarte y hacerte sentir útil.
Además, científicamente, se ha estudiado el beneficio real del voluntariado, asociando a aquellas personas que lo practican, con tener una mejor salud mental.