El presidente de la Comisión de Salud, diputado Elías Octavio Iñiguez Mejía, advirtió que si no se invierte en prevenir las enfermedades crónico-degenerativas nunca va a alcanzar la bolsa presupuestal que se asigne al sector salud.
Se requiere cambiar de estrategia para resolver la problemática de salud pública que prevalece en México, a través de la prevención y con un marco jurídico que ofrezca soluciones realistas de acuerdo con las condiciones económicas prevalecientes en la población.En entrevista, Iñiguez Mejía apuntó que urge atender a los sectores vulnerables que carecen de medios suficientes para revertir pobreza y falta de acceso al cuidado médico.
“Es necesario modificar la forma de pensar de la gente, para revertir padecimientos como la obesidad y la incidencia de embarazos en adolescentes”, precisó.
Hasta ahora no se ha logrado superar el primer lugar en obesidad que tiene el país. La prioridad son la niñez y los adolescentes, para definir lo que se va a hacer para prevenirla, así como los padecimientos que se derivan de ella y la muerte en adultos jóvenes por malestares cardiovasculares, diabetes e hipertensión arterial.
Informó que en este segundo año de la LXIII Legislatura, la Comisión de Salud impulsará iniciativas para reducir la obesidad infantil. Adelantó que se elabora una propuesta para que los fabricantes de todos los productos con cierta cantidad de calorías paguen más impuesto y se canalice efectivamente a la prevención desde el nivel preescolar y con los padres de familia.
Asimismo, promoverá una iniciativa que regule y aliente la donación de órganos e impulsará el tema del uso terapéutico de la mariguana. Además, estará pendiente del Registro Único de Personas con Discapacidad.
Iñiguez Mejía consideró que el rumbo más realista para abatir el aumento de enfermedades crónicas, es difundir información desde preescolar y primaria para que los infantes aprendan a crecer realizando actividades diferentes que prioricen alimentarse más sano, beber agua y caminar.
Parecen simples las acciones, pero se requiere retomarlas para acceder a una mejor calidad de vida. “No se quiere seguir en el primer lugar en obesidad infantil, porque cada vez cuesta más dinero y se diluye su rendimiento, ya que tenemos más niños con padecimientos renales, hipertensos, cardiópatas y nefrópatas”.
Refirió que el 24% del presupuesto del IMSS se destina a la atención de males renales, y “no estamos haciendo nada para prevenir”. Informó que se construye una iniciativa que prevenga los males renales en niños, primera causa de enfermedad en menores de 5 años.
Es vital que la población se concientice y se mueva, haga deporte, deje de usar el coche y cambie su alimentación de acuerdo con su capacidad económica, porque tampoco se le puede exigir que con el salario mínimo que gana cambie intempestivamente su dieta.
Se necesitan políticas públicas realistas y diferentes en salud que valoren la situación de las familias, porque no se puede dar a una madre una receta o una orden de menú, cuando no tiene el recurso suficiente para comprarlo.
A partir de la prevención se solucionará la problemática de salud pública actual, y paralelamente ayudar a la población que ya enfermó para que se inserte en una vida productiva; a las jóvenes que se han embarazado a que sigan sus estudios y conjunte su responsabilidad de madres con una actividad laboral.
“Urge que los ciudadanos entiendan que sin su participación no vamos a solucionar nada. No pueden dejar toda la responsabilidad al Presupuesto ni al Ejecutivo”, concluyó.