Los especialistas parecen estar de acuerdo en que no todos los azúcares son iguales y no todos son malos si se consumen de manera responsable.
“El azúcar que realmente debe preocuparnos es el azúcar añadido”, dice el Dr. Donald Hensrud, director del Programa para vida sana de Mayo Clinic y autor de la Dieta de Mayo Clinic.
El Dr. Hensrud comenta que el azúcar añadido es el responsable de gran parte de las calorías ingeridas por la mayoría de las personas y una de las principales causas del sobrepeso.
Sin embargo, hay dulces sin azúcar añadido como es el caso de las frutas: “Se dice que contienen mucho azúcar, pero un trozo pequeño de fruta solo tiene 60 calorías. Las frutas tienen mucha agua y otros nutrientes; además tienen fibra, así que aportan muchos otros beneficios”, añade el especialista.
El azúcar de la fruta no los hará engordar, sino que probablemente haga lo opuesto.
“Los estudios muestran que cuando la gente consume más fruta y verduras, el riesgo general de subir de peso disminuye porque no comen otros alimentos con alto contenido calórico”, concluye el Dr. Hensrud.
Entonces, podemos concluir que ser goloso no es realmente malo, solo debemos aseguraros de elegir los dulces correctos así como las cantidades correctas de azúcar.