Los ácidos grasos Omega 3 como el DHA (Ácido docosahexaenoico), son esenciales para el desarrollo mental y visual durante los primeros años de vida del niño.
Los ácidos grasos Omega 3 como el DHA (Ácido docosahexaenoico), son esenciales para el desarrollo mental y visual durante los primeros años de vida del niño, que son años críticos para el desarrollo de funciones cerebrales como la concentración, memoria y aprendizaje[1], ya que el cerebro se desarrolla en un 85%** durante los primeros cinco años de vida[2].
Expertos de la Organización para la Alimentación y la Agricultura de las Naciones Unidas (FAO, por sus siglas en inglés), así como de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y la Agencia Francesa de Seguridad Sanitaria Alimentaria (AFSSA)* recomiendan que los niveles adecuados de ingesta diaria de este neuronutriente oscilen entre 70 a 100 mg.
Sin embargo, actualmente no se cuenta con investigaciones y datos precisos que muestren qué tan cerca o lejos está la población infantil mexicana de llegar a ese consumo recomendado de DHA, y que brinden información tanto a los profesionales de la salud como a los padres de familia, para adaptar la alimentación de sus hijos en función de alcanzar diariamente los niveles recomendados por los expertos mundiales antes citados.
“Si consideramos el tipo de alimentos que más se consumen en México y la dieta promedio de un niño, podríamos establecer que estamos lejos de llegar a las cifras recomendadas, por lo que es muy importante contar con investigaciones rigurosas que nos informen lo que sucede en realidad”, indica el doctor Eduardo Álvarez, Director Médico Regional para América Latina de Mead Johnson Nutrition.
Los pediatras recomiendan que se incluya en la alimentación de los niños alimentos con DHA como pescados[3] de aguas frías (salmón, trucha, mero, sardinas, anchoas, atún, lubina y bacalao), ya que nuestro organismo no produce este neuronutriente directamente y en cantidad suficiente.
El Dr. Eduardo Álvarez sugiere proporcionar este nutriente a través de lácteos de Mead Johnson Nutrition, del los que dice, pueden alcanzar la recomendación diaria del DHA, ya que actualmente se ha estimado que el consumo de DHA en población infantil mexicana es bajo.
Referencias:
1 Bryan J, Osendarp S, Hughes D, Calvaresi E, Baghurst K, van Klinken JW. 2004. Nutrients for cognitive development in school-aged children. Nutr Rev 62:295-306.
[2] Harris J, et al. The Measurement of the man. Minneapolis: University of Minnesota, Press, 1930.
* Agencia Francesa de Seguridad Sanitaria Alimentaria (AFSSA) que fue recientemente incorporada a ANSES (Agencia Nacional de Seguridad Sanitaria de la alimentación, el ambiente y el trabajo) **85% del tamaño total en la vida adulta. (Curvas de Scammon)