El Plan para la Seguridad Alimentaria, Nutrición y Erradicación del Hambre en América Latina y el Caribe tiene como objetivo ayudar a los países de América Latina y el Caribe a superar en forma definitiva el hambre y la malnutrición, para 2025 y rescatar a los que siguen excluidos: 37 millones que aún sufren hambre según la FAO y 71 millones de indigentes según datos de la CEPAL.
El plan, desarrollado por la FAO con el apoyo de la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) a solicitud de la II Cumbre de la CELAC, se basa en cuatro pilares que abordan las temáticas de:- Coordinación de estrategias a nivel nacional y regional, con enfoque de género
- Acceso oportuno y sostenible a alimentos inocuos y nutritivos
- Ampliación de los programas de alimentación escolar priorizando una atención a todas las formas de malnutrición, desde la subalimentación hasta la obesidad y,
- Finalmente, la estabilidad en la producción y enfrentamiento oportuno a los problemas que presenta el cambio climático.
El plan sistematiza las experiencias exitosas de la región para facilitar su aplicación en otras regiones del mundo e identifica los potenciales vínculos entre distintas áreas que pueden generar círculos virtuosos de desarrollo. Un ejemplo de ello es la vinculación de la agricultura familiar con la alimentación escolar, así como el uso de los programas de transferencias de ingresos para que las comunidades rurales se puedan beneficiar gracias al incremento de la producción local.
Posteriormente en su discurso declaró “América Latina y el Caribe no solo avanza a pasos firmes en la erradicación del hambre en la región, si no que también inspira al mundo”.
Logros de América Latina y el Caribe en la lucha contra el hambre
Según la FAO, América Latina y el Caribe es la única región del mundo que ya alcanzó la meta del Primer Objetivo de Desarrollo del Milenio de reducir a la mitad la proporción de personas que sufren hambre para el año 2015 a más tardar. Asimismo, la región está a las puertas de conquistar también el objetivo de la Cumbre Mundial de la Alimentación de reducir a la mitad el número total de personas subalimentadas.
Raúl Benítez, Representante de la FAO para América Latina y el Caribe, destacó que “lo que distingue a América Latina y el Caribe es el nivel de compromiso político que existe con la seguridad alimentaria, que se expresa en una diversidad de estrategias y políticas públicas focalizadas en las poblaciones vulnerables.”
Benítez recordó que la región fue pionera en su propuesta de erradicar el hambre antes del año 2025, dando forma a la Iniciativa América Latina y Caribe sin Hambre (IALCSH), un compromiso político asumido por todos los países de la región en 2005.