Escrito por Barbrha Ibáñez V. Especialista explica que existen diferentes clasificaciones para las emociones, según el autor y la perspectiva, pero entre las que pueden considerarse tóxicas o negativas se encuentran la tristeza, angustia, ansiedad, melancolía, temor, insatisfacción, enojo, entre otras.
Con el fin del año a la vuelta de la esquina, Fundación Dove para la Autoestima comparte con las lectoras de Plenilunia su experiencia sobre la importancia de cerrar ciclos y los beneficios que adquirimos al vivir en el presente.
En el artículo anterior “Huellas emocionales”, Alejandra Buggs menciona el concepto de “bloqueo emocional nuclear”, conformado por las heridas generadas por la madre y el padre. En esta segunda parte «Retomar mi esencia», Buggs profundiza sobre los mecanismos de defensa que construimos desde pequeñas y pequeños, para defendernos de aquello que nos amenaza específicamente en lo emocional.
Hacerlo con la luz apagada, usar ropa sensual de tejidos naturales, preferir juguetes eróticos, aceites y jabones biodegradables o protegerse con métodos anticonceptivos en equilibrio con el organismo, son parte de una nueva manera vivir la vida amorosa con estilo “ecosexy” en armonía con el entorno y el medio ambiente.
Las huellas emocionales las sufrimos todas las personas, son aquellas que se presentan en las primeras etapas del desarrollo y difíciles de detectar porque de manera inconsciente las acomodamos donde nos lastimen menos, aunque eso no impide que suframos sus consecuencias.
¿Por qué si somos mujeres independientes, trabajadoras, exitosas, que decidimos qué hacer con nuestro cuerpo, nuestra sexualidad, creencias; dueñas de nosotras mismas, no nos hacemos o no queremos responsabilizarnos de nuestros pensamientos, y sobre todo, de nuestra felicidad? ¿Por qué dejamos que otros decidan si podemos ser felices?, ¿por qué damos ese poder a otros?
Es verdad que los hijos se llevan gran parte de nuestras preocupaciones, pues queremos lo mejor para ellos. Una actividad formidable para que estén sanos y se desarrollen de manera adecuada es el deporte. Incúlcaselo.
Éste es un libro contado en segunda persona que nos lleva de la mano a manera de novela contándonos la vida y tenacidad de una mujer que se sobrepone a la tragedia y al desamor. Al mismo tiempo, nos transmite los secretos más íntimos de un ser lleno de ilusiones
Por Juana Eugenia Olvera. No sé cuál fue la causa que hizo que la mujer dejara de aceptarse como es. Las escucho decir: Odio mi cuerpo… Mira esta cara… Y este pelo… ¡Uf! Qué nariz… Me choca tener la regla (sin darse cuenta que ésta es un regalo).
Es una obra novelada que trata el caso de una paciente, Leah, quien encontró en el silencio su mejor escondite sin imaginar siquiera que, con el correr del tiempo, se convertiría en su prisión y en el origen de sus sufrimientos al no poder establecer relaciones de largo plazo.
Hoy en día el rol de la mujer ha cambiado, y una gran parte de las mujeres están presentes en el terreno laboral, debido a cuestiones económicas y un deseo de superación personal. Actualmente la mujer se encuentra en la disyuntiva entre ser madre o profesionista. Lograr ambas cosas es muy factible, aunque con sus costos personales.