Diputados eliminan en educación militar distinción entre mujeres y hombres; se remite al Senado de la República

El Pleno camaral aprobó el pasado 26 de noviembre de 2015, con unanimidad de 379 votos favor, el dictamen que deroga el artículo 2 de la Ley del Servicio Militar, por considerarlo obsoleto, al señalar que la instrucción de tipo castrense que se imparta a las niñas tenderá a capacitarlas para labores propias de su sexo y conexas con el servicio militar.

El documento, remitido al Senado de la República para sus efectos constitucionales, busca impulsar la paridad entre hombres y mujeres en este ámbito; prevenir y eliminar la discriminación, y lograr la igualdad de género, así como estar en concordancia con los instrumentos internacionales en materia de derechos humanos.

Al fundamentar el dictamen, la secretaria de la Comisión de Defensa Nacional, diputada Edith Anabel Alvarado Varela, expresó que esta reforma elimina de forma tajante y concluyente la distinción entre la educación militar que se da a las mujeres y a los hombres, la cual no se contempla en el Reglamento para el Funcionamiento de las Academias Particulares de Tipo Militar.

Con esta derogación, puntualizó, se evita que instituciones, autoridades y particulares enarbolen argumentos jurídicos para discriminar a las mujeres en la impartición de la educación militar. “Nuestras Fuerzas Armadas han hecho suya la agenda de la perspectiva de género con acciones como la instrumentación del Observatorio para la Igualdad entre Mujeres y Hombres en el Ejército y Fuerza Aérea Mexicanas”, reconoció.

Afirmó que honor, lealtad y patriotismo, son los sabios valores que forman el carácter militar y que acompañan a las Fuerzas Armadas para resguardar la integridad de la nación y guiar a las nuevas generaciones, y éstos no admiten distinción por motivo de género, no discriminan.

La disposición que se deroga era discriminatoria, contraria a los derechos humanos y a los instrumentos internacionales, suscritos por el Estado mexicano y ratificados por el Senado de la República. Ahora, la educación que se imparte en el Sistema Educativo Militar, impone las mismas actividades a las mujeres y a los hombres. “Esta formación busca el fortalecimiento de los valores y virtudes humanos y militares, y desarrolla personas autodisciplinadas”, comentó.

Afirmó que ningún esfuerzo está demás cuando se trata de lograr la activa e incluyente participación de las mujeres en todos los ámbitos de la vida nacional. “No podemos estar satisfechos si una sola mujer es excluida de los beneficios del desarrollo y de las oportunidades laborales, argumentando razones de género”, añadió.

En los posicionamientos, el diputado Abdies Pineda Morín, refrendó su respeto a las Fuerzas Armadas por los servicios que todos los días presta con convicción y profesionalismo, y expresó que la disposición que hoy se quita de la Ley del Servicio Militar atendía una realidad de hace 75 años, ya que señalaba que a las niñas se les capacitaría para labores propias de su sexo.

Sostuvo que esta norma viola tratados y convenciones internacionales de los derechos humanos en beneficio de las mujeres y está en contra del artículo 1 de la Carta Magna y de los principios normativos constitucionales de autodeterminación de los pueblos, la no intervención, la solución pacífica, la igualdad jurídica, el respeto, la protección y promoción de los derechos, y la lucha por la paz y la seguridad.

El legislador Mariano Lara Salazar destacó que el combate a la discriminación y la desigualdad son temas prioritarios; consideró oportuno este dictamen, ya que “por mucho tiempo las Fuerzas Armadas habían sido instituciones tradicionalmente conformadas de manera exclusiva por hombres, un reflejo de tiempos pasados que hoy ya no tiene vigencia y que atenta contra la evolución social y los derechos de las mujeres”.

Manifestó que el dictamen da cuenta de postulados contra la discriminación hacia las mujeres en materia de instrucción militar, ya que la actual ley es obsoleta y alejada de la realidad. Se comprometió a impulsar los derechos humanos y la equidad de género. “Solo de esta forma podemos aspirar a construir un país más democrático, incluyente e igualitario. Hemos demostrado el interés y preocupación por promover su plena vigencia en términos de igualdad de oportunidades para hombres y mujeres”.

Germán Ernesto Ralis Cumplido, diputado y proponente de esta reforma, indicó que su objetivo fue pugnar por la equidad, igualdad y eliminación de la desvalorización femenina, y luchar contra la discriminación. “Las leyes mexicanas deben de ser reformadas y actualizadas a los nuevos tiempos, para que sean funcionales, pero, sobre todo, para eliminar cualquier tipo de desigualdad implícita contra las mujeres”.

Subrayó que esta discriminación se debe prevenir, atender, erradicar y, sobre todo, sancionar y consideró necesario comprometerse con la equidad en un trabajo permanente que sea visible en todos los niveles. “Hoy se crea un parteaguas para atender y fortalecer los derechos humanos de las mujeres en las fuerzas castrenses. La paridad en este ámbito, es una obligación que debe ser acatada”.

La diputada Norma Xóchitl Hernández Colín señaló que la Ley de Servicio Militar “ya resulta anacrónica y desactualizada. Es importante que las mujeres con vocación militar puedan desarrollarse plenamente en todas las armas y grados en el Ejército del aire, tierra y mar, lo que contribuye a fortalecer las acciones sociales en los desastres naturales y humanos. También en la labor social de alfabetización, alimentación y las políticas en contra de las adicciones y, sobre todo, cuando pueda darse una amenaza a nuestra soberanía”.

Consideró que, en pleno Siglo XXI, debe imperar la paridad, los derechos y las libertades, así como una igualdad plena. “Estamos en un momento histórico en el cual las mujeres habremos de participar con nuestras convicciones, fortalezas y capacidades, para que desde nuestras particularidades impulsemos el desarrollo nacional. Es hora de hacer en los hechos acciones para lograr el país que queremos”, añadió.

Wendolin Toledo Aceves, expuso que el dictamen tiene como prioridad favorecer la equidad de género en el servicio militar nacional y, de esta manera, permitir a las mujeres desarrollar totalmente sus capacidades y aptitudes, ya que uno de los objetivos es la formación de ciudadanos íntegros, responsables, disciplinados, sanos y respetuosos de los derechos humanos y la equidad de género.

Refrendó su consideración y admiración por las Fuerzas Armadas, apoyando el dictamen que deroga el artículo 2 de la Ley del Servicio Militar, “porque reconocemos que la equidad de género, además de ser un derecho humano, se convierte en un elemento indispensable para el progreso económico y social”.

La diputada Cristina Ismene Gaytán Hernández puntualizó que esta reforma tiene como finalidad quitar condiciones de discriminación por motivo de género en la Ley del Servicio Militar. “No solo estamos de acuerdo con la modernización del lenguaje de una ley expedida bajo el contexto histórico de la Segunda Guerra Mundial, sino estamos por una reconceptualización total de lo que constituye el servicio militar nacional, como una contraprestación de las y los ciudadanos hacia el Estado”.

Se pronunció por iniciar una revisión exhaustiva al marco jurídico que rige al Ejército, para garantizar normas que establezcan, en concordancia con la nueva realidad del país y la mundial, la inclusión, la equidad, la justicia y la imparcialidad, con el objetivo de fortalecer su actuación institucional, el respeto a los derechos humanos y específicamente los de las mujeres militares.

La legisladora Elva Lidia Valles Olvera mencionó que actualmente el Ejército presenta avances significativos en equidad de género. Prueba de ello es que hoy cuenta con alrededor de 13 mil mujeres en sus filas, con especialidades altamente calificadas, con diferentes grados de rango superior como generales, coronelas, tenientes coronelas, mayoras, médicas, ingenieras, abogadas y demás cargos relevantes en las Fuerzas Armadas mexicanas.

“Consideramos que la paridad entre hombres y mujeres en el ámbito militar deja clara la prevención y eliminación de la discriminación, lo que manifiesta el compromiso del Estado mexicano con la comunidad internacional, con la finalidad, siempre y en todo momento, de la promoción y defensa del principio pro persona; sin embargo, se requiere que el marco jurídico supere aquellos elementos obsoletos que obstaculizan y limitan su efectividad”, apuntó.

La diputada Dora Elena Real Salinas precisó que el dictamen representa un paso de la mayor importancia para lograr la plena igualdad entre hombres y mujeres en cuanto a derechos y oportunidades de desarrollo. “No sólo se deroga una disposición obsoleta, también se cierra la puerta a cualquier forma de discriminación contra las mujeres en materia de educación militar”.

Destacó que esta Cámara de Diputados ya ha legislado para permitir que las mujeres asciendan en la escala jerárquica y ocupen el más alto grado que es el de general. Cuestionó: “¿por qué no eliminar toda forma de discriminación que aún se puede encontrar en el orden jurídico? Ratificamos nuestro compromiso para que cada mujer, en cada rincón del país, pueda mirar el futuro con optimismo y con esperanza”.

La ley actual, en su artículo 2 señala: “Los establecimientos educativos de la Federación, los del Distrito Federal y Territorios Federales, los particulares incorporados y los de los Estados cuando estén sujetos al régimen de la coordinación federal, impartirán instrucción militar conforme a los reglamentos y disposiciones que, coordinados con la Secretaría de Educación Pública, expida la Secretaría de la Defensa Nacional, la cual tendrá a su cargo este servicio y designará a los instructores. En todo caso, se cuidará de que la instrucción de este tipo que se imparta a las niñas, tienda a capacitarlas para labores propias de su sexo y conexas con el servicio militar”.

Abunda que: “Los maestros y catedráticos, así como los miembros del personal administrativo de dichos establecimientos, para los efectos de esta ley y dentro de las obligaciones propias de la Reserva a que pertenezcan, tendrán el carácter de auxiliares de los instructores nombrados para sus respectivas Escuelas”.