La música tiene un efecto sanador en el cerebro, dice la ciencia

La música es un tipo de lenguaje utilizado, en muchas ocasiones, para comunicar, evocar y/o reforzar diversas emociones. De acuerdo con expertos, el cerebro entrenado musicalmente experimenta cambios particulares en su anatomía y funcionalidad.

La música, con algún valor emocional para nosotros, tiene un efecto terapéutico en el cerebro.

Por ello, especialistas del Hospital Houston Methodist realizaron un estudio sobre el efecto de la música en el cerebro, en el cual se expuso a un grupo de 12 voluntarios a un estudio de resonancia magnética, con audífonos puestos a través de los cuales escuchaban música preseleccionada, así como conversaciones y canciones seleccionadas por el participante.

El estudio constó de 5 minutos divididos en intervalos de 30 segundos de audio y 30 segundos de silencio, durante los cuales la selección fue la siguiente: lectura de noticias sin intención, un discurso emocional, plática con idioma desconocido, dos selecciones de música desconocida para el voluntario y música seleccionada por cada uno de los voluntarios.

El estudio fue liderado por el Dr. Christof Karmonik, neurocientífico del Hospital Houston Methodist, quien explicó que lo que se buscó es observar qué áreas del cerebro reciben mayor estímulo con ciertos sonidos.

De esta manera podemos observar la función cerebral y ver qué áreas están siendo estimuladas y si existe algún área del cerebro que presente algún daño, como por ejemplo un accidente cerebro vascular,” aseguró el especialista.

Los investigadores descubrieron que cuando las personas escuchaban música desconocida había ciertos estímulos cerebrales, pero cuando fueron expuestos a música con un alto vínculo emocional, la reacción cerebral era mayor, 
con mayor presencia de irrigación sanguínea.

Lo anterior ayudará a los especialistas a crear una nueva terapia con base en la música, en la cual crearán un playlist con música que le sea agradable a los pacientes.

Te recomendamos:  La ley férrea del cáncer

Lo que se busca es que los pacientes con algún tema de daño cerebral puedan recibir mayor irrigación sanguínea en zonas afectadas, y de esta manera esa área pueda ser tratada y el daño pueda ser reparado parcialmente o evitar que se agudice.

Imagen cortesía de Gabriela Xochiteotzin Peña | Plenilunia



Escrito por

Editora y periodista especializada en periodismo en salud. Socia Fundadora de Plenilunia desde 2004. Editora de revistas como Plenilunia, Diabetes Hoy, así como publicaciones especializadas para la industria farmacéutica. @GabXochiteotzin

Etiquetas , , , , , , , , , , ,

Temas relacionados