Una opción para úlceras y hemorragias gástricas

Un estudio amplio entre 700 pacientes de 16 países de Europa, Asia y Sudáfrica demostró lo anterior con este fármaco de segunda generación, porque además de corregir los niveles de ácido al inhibir la bomba de protones bajo nuevos procedimientos químicos, el medicamento contribuye en una coagulación efectiva.

El Dr Joseph Sung, responsable del estudio sobre Hemorragia por Úlcera Péptica (PUB, por sus siglas en inglés) y gastroenterólogo del Instituto de Enfermedades Digestivas en Hong Kong, China, explica que los pacientes favorecidos con esomeprazol redujeron su ingreso al quirófano.

–¿Se encontraron reacciones adversas durante el estudio?

Solamente algunos efectos locales donde se administraba el medicamento, pero no efectos colaterales generalizados puesto que el medicamento se suministra por vía endovenosa.

–¿Cuál es la principal causa de las úlceras péptica y duodenal y de qué manera actúa este fármaco?

-El 16% de las úlceras detectadas en el estudio fue por hellicobacter pillory y 40% por el uso de aspirina o de otros medicamentos antiinflamatorios.

“Para que quede claro, estos antiinflamatorios son conocidos como AINES (antiinflamatorios no esteroideos) que en muchos casos no son prescritos en un consultorio, pero sí sabemos que provocan úlceras y pueden ser los únicos fármacos que en dosis bajas controlan a muchos pacientes diversos, por ejemplo, con artritis reumatoide.

“El esomeprazol actúa inhibiendo la producción de ácido a nivel del estómago (en la bomba de protones) y por tanto favorece el coágulo dentro de la úlcera, ya sea duodenal o gástrica, porque en muchos ambientes la coagulación no se realiza, digamos, de manera normal, porque no pega adecuadamente”.

Los resultados del estudio PUB se presentaron primero en Viena, Austria, y posteriormente el Dr Jung vino a presentarlos en México al ser ponente durante la Semana Nacional de Gastroenterología celebrada en Veracruz.

Considere los efectos secundarios

Como siempre aquí en Plenilunia recomendamos, no deje de acudir a su médico y preguntar si alguno de los siguientes síntomas es intenso o no desaparece, cuando está tomando alguna presentación de esomeprazol:

Dolor de cabeza, náuseas, gases, estreñimiento, sequedad en la boca.

Algunos otros efectos secundarios pueden ser graves, y en su caso, hay que llamar al médico de inmediato o pedir ayuda de emergencia:

Ampollas o descamación de la piel, urticaria, sarpullido, comezón, dificultad para respirar o tragar, inflamación de la cara, la garganta, la lengua, los labios, los ojos, las manos, los pies, los tobillos o las pantorrillas, ronquera, latidos del corazón irregulares, rápidos, o fuertes, cansancio excesivo, mareos, sensación de mareo, espasmos musculares, temblor incontrolable de una parte del cuerpo, convulsiones, diarrea grave con heces acuosas, dolor de estómago, fiebre.

Debe saberse igualmente que las personas que toman inhibidores de la bomba de protones, como esomeprazol, por dosis altas o que los toman durante un año o más pueden llegar a tener mayores probabilidades de fracturas en muñecas, caderas o columna vertebral.