¡Mujeres a tocar para prevenir!

Los senos además de ser las glándulas que producen la leche materna para los pequeños, son lo que nos identifica como mujer, conforman la esencia femenina, por tal motivo cuando se llega a presentar alguna bolita o algo anormal, está afectando no solo a la parte física, si no emocional.

Si la autoexploración formara parte de nuestra rutina, el índice de curación sería hasta del 97% comenta la Dra. Patricia Cortés, oncóloga, médico adscrito al Hospital 20 de Noviembre del ISSSTE “Si dejáramos de lado los tabúes y tocamos nuestros senos cada mes, estoy segura que muchas mujeres no tendrían qué perder sus senos.

Ellos son una parte fundamental para nosotras, además de aportar al crecimiento de nuestros pequeños, es parte de nuestra estética y complexión como mujeres, ayudan a mantener el equilibrio”, concluye la oncóloga.

La especialista recomienda seguir estos sencillos pasos para estar en contacto con tu cuerpo, solo tienes que hacer lo siguiente. Elige un día, puede ser el día de tu cumpleaños o cuando pagas la colegiatura, posteriormente mes con mes, realiza la autoexploración esa misma fecha.

1.- De frente al espejo, con los brazos caídos a lo largo del cuerpo; fíjate muy bien en el color de la piel de tus mamas, que no aparezcan nódulos u hoyuelos, o cambios en el tamaño y aspecto.

2.- Este procedimiento lo puedes hacer acostada, parada o en la ducha, lo importante es que lo realices mes con mes. Con los tres dedos
centrales juntos y planos de la mano izquierda realiza movimientos circulares y pequeños, presionando con firmeza la mama derecha. Debe ser una presión fuerte, pero tú mide hasta donde aguantes. Tócate sin miedo.

3.- Tiene que recorrer toda el área del seno haciendo presión de manera circular. De arriba hacia abajo formando líneas verticales y horizontales.
También en círculos empezando en la periferia del seno hasta llegar al pezón. Y no olvides hacer lo mismo en ambos senos.

4.- Finalmente, presiona el pezón con tus dedos pulgar e índice como si quisieras exprimirlo y observa si existe algún tipo de secreción.

La exploración a tus senos podría salvarte, no dudes en acudir al ginecólogo y si tienes entre 35 y 40 años la mastografía es una opción para que estés en contacto con tu cuerpo. Ahora ya no tienes excusa para tocarte, comparte esta información con todas las mujeres que conoces.